Industria Argentina 2025: es momento de transformar el futuro

Fuente: Clarín – El presidente de ADIMRA opina sobre el futuro de la industria metalúrgica.

Escribe Ing. Elio Del Re, Presidente de ADIMRA (Asociación de Industriales Metalúrgicos de la República Argentina)

Luego de un 2024 marcado por altibajos en la producción industrial, con caídas significativas influenciadas por múltiples factores, este 2025 debe ser el año en el que la industria se consolide como motor del desarrollo nacional. Es imperativo que cada región encuentre su lugar en este camino hacia el progreso.

ADIMRA representa a más de 20.000 empresas en todo el país, las cuales generan empleo directo e indirecto para más de un millón de argentinos. Con 120 años de historia, nuestra asociación siempre ha estado orientada hacia el futuro, trabajando para fomentar el desarrollo industrial y el empleo, y apostando a la innovación como herramienta clave para enfrentar los desafíos tecnológicos que plantea un mundo cada vez más competitivo.

La industria metalúrgica argentina no solo produce, sino que también inspira y lidera. Exportamos a más de 155 países, impactando positivamente en nuestra economía y generando empleo de calidad en comunidades de todo el territorio nacional. Estos logros reflejan nuestra capacidad para integrarnos en cadenas de valor globales sin perder de vista la importancia del desarrollo local.

Una industria metalúrgica fuerte: pilar del desarrollo

No existe país desarrollado sin una industria metalúrgica sólida. Este sector es parte fundamental del ecosistema industrial, proveyendo máquinas, equipos y tecnología a diversas actividades productivas. Además, es un motor clave para la innovación y la integración de nuevos avances científicos.

El último año fue difícil, con una caída del 12,1% en la producción metalúrgica comparado con 2023. Hacia adelante observamos con atención el desacople que puede generarse al interior del sector. Por un lado, actividades vinculadas a la construcción y al consumo de los grandes centros urbanos tendrán un menor dinamismo mientras que sectores como petróleo, gas, minería y maquinaria agrícola presentan expectativas positivas, aprovechando las oportunidades generadas por los recursos naturales y energéticos.

Argentina tiene un gran potencial en la industrialización de estos recursos, pero debemos evitar caer en un modelo meramente extractivista y, en cambio, desarrollar tecnología y procesos que permitan agregar valor en origen. Para ello necesitamos que toda la cadena trabaje de manera acoplada porque de lo contrario se pone en riesgo la sostenibilidad del proceso de crecimiento.

Dos mundos, un reto global

Hoy enfrentamos un panorama industrial dividido. Por un lado, países con estrategias comerciales consolidadas, diseñadas para dominar tecnológicamente. Por otro, economías que luchan por proteger su empleo y producción con recursos limitados. Esta asimetría nos obliga a buscar estrategias inteligentes para fortalecer nuestra industria y fuerza laboral.

Hace una década, exportábamos más de 7.000 millones de dólares; hoy esa cifra es de 4.500 millones, aunque nuestra capacidad instalada permanece intacta. Es momento de revertir esa tendencia y recuperar terreno.

La política industrial está de moda. En este contexto, la asociación entre el sector público, el privado y el complejo científico-tecnológico es indispensable. Debemos trabajar juntos, equilibrando intereses y fomentando la colaboración entre todos los sectores productivos: industria, agro, comercio, servicios, finanzas, construcción, educación y tecnología.

La estabilización de variables macroeconómicas, como la reducción de la inflación y la normalización del comercio exterior, son condiciones necesarias para brindar un marco de previsibilidad que favorece tanto al desarrollo industrial como a la inversión productiva. Sin embargo, Argentina tiene un desafío central en su proceso de crecimiento: potenciar la producción local de sus sectores de manera sostenida. Si solo se recurre al apalancamiento de importaciones para suplir este proceso, corremos el riesgo de desmantelar capacidades industriales esenciales, lo que afectaría tanto el empleo como la continuidad de nuestras empresas.

Un claro ejemplo de este riesgo es la posibilidad de permitir la adquisición de bienes de capital usados, una competencia desleal que no solo desalienta la inversión en tecnología de fabricación nacional, sino que también impacta negativamente en las empresas locales, comprometiendo su capacidad de competir y desarrollarse.

Una oportunidad para la unión y el crecimiento

El sector privado también tiene su parte en este desafío. Mejorar prácticas, impulsar la innovación, optimizar procesos y capacitar al talento humano son pasos esenciales para acompañar el crecimiento.

Argentina cuenta con recursos naturales únicos y un talento humano incomparable. Nuestra visión es que estas fortalezas pueden ser el motor de una nueva era de desarrollo. La industria es parte fundamental de la solución a los problemas del país, y tenemos la responsabilidad de construir un futuro donde todos los sectores trabajen de manera articulada.

El camino no será fácil, pero es el desafío que debemos asumir para transformar nuestra realidad. Creemos en la industria, porque creemos en Argentina.

El consumo en las pymes repunta, pero la recuperación aún sigue lejos

Fuente: La Nación – Las ventas minoristas crecieron un 25,5% interanual en enero, pero los comerciantes advierten que aún no compensan la caída del año pasado; la pérdida de poder adquisitivo y los costos operativos siguen siendo obstáculos para el crecimiento.

Las ventas minoristas en pymes arrancaron 2025 con una suba interanual de 25,5% a precios constantes, según el Índice de Ventas Minoristas elaborado por la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME).

Aunque la cifra refleja una tendencia positiva en comparación con el mismo mes del año anterior, los comerciantes advierten que el repunte no es suficiente para compensar la caída histórica de enero de 2024, cuando las ventas se desplomaron un 28,5%.

El inicio del año estuvo marcado por un contexto desafiante: menor liquidez tras las Fiestas, una temporada de vacaciones que llevó a muchos consumidores al exterior y costos operativos que continúan en alza. A pesar de ello, los empresarios sostienen expectativas positivas para los próximos meses, impulsadas por la estabilidad de los precios y la reactivación del consumo con el inicio del ciclo lectivo.

“Este aumento en las ventas no alcanza a cubrir lo que se perdió a finales de 2023 e inicios de 2024. Sin embargo, si simplificamos el análisis, podemos decir que hay una tendencia positiva hacia la recuperación. El año pasado, casi todos los meses fueron negativos y cerramos con una caída del 10%”, explicó a LA NACION el Ricardo Diab, Secretario General de CAME.

Los siete rubros relevados por la entidad mostraron aumentos interanuales en enero. Entre los que más crecieron se destacan bazar, decoración y textiles para el hogar (+33,8%), seguido por alimentos y bebidas (+32,5%) y textil e indumentaria (+27,6%). No obstante, en la comparación mensual desestacionalizada, el comercio pyme registró una baja del 0,5% frente a diciembre, lo que sugiere que, si bien la tendencia es positiva, aún persisten desafíos estructurales.

El sector de bazar, decoración y textiles para el hogar fue el de mayor crecimiento interanual en enero, con un aumento del 33,8%. Sin embargo, la caída del 0,5% en la comparación mensual refleja que la recuperación aún enfrenta desafíos
El sector de bazar, decoración y textiles para el hogar fue el de mayor crecimiento interanual en enero, con un aumento del 33,8%. Sin embargo, la caída del 0,5% en la comparación mensual refleja que la recuperación aún enfrenta desafíos

Uno de los principales obstáculos sigue siendo la pérdida de poder adquisitivo. A principios de 2024, la inflación provocó un deterioro significativo en los salarios, lo que impactó de manera directa en el consumo. En paralelo, muchos comerciantes ajustaron sus precios a un valor del dólar que finalmente no se materializó, lo que generó un desajuste en la demanda. “Hubo un comportamiento preventivo por parte de algunos sectores, con aumentos de precios y acumulación de stock, lo que agravó la situación”, explicó el directivo.

Otro factor clave es la financiación. La posibilidad de acceder a pagos en cuotas con tasas más bajas permitió sostener las ventas en sectores como indumentaria, calzado y marroquinería, además de generar un leve impulso en rubros como bazar y decoración. Sin embargo, este alivio no es suficiente para compensar el peso de los costos operativos, que siguen en aumento. La actualización de tarifas y servicios, sumada a la presión impositiva, afecta la rentabilidad y competitividad de las pymes.

Mientras tanto, los comerciantes también observan con atención la apertura de importaciones, una medida que si bien beneficia al consumidor al ampliar la oferta y reducir algunos precios, genera incertidumbre en la producción local debido a las diferencias en las cargas impositivas entre países. “Es un factor a considerar. En el corto plazo, puede representar un alivio para el bolsillo del consumidor, pero a largo plazo puede comprometer a muchos sectores que ya operan con márgenes ajustados”, advirtió el secretario general de CAME.

A pesar de estos desafíos, la mayoría de los comerciantes mantiene una mirada optimista sobre el futuro. Según el relevamiento de CAME, el 58% de los encuestados espera que la situación de su empresa mejore en los próximos meses, mientras que un 37% cree que se mantendrá igual y solo un 5% prevé un deterioro.

La expectativa se sostiene en la moderación de la inflación, la posible reactivación de la demanda interna y un contexto de mayor estabilidad económica. “Tenemos la convicción de que, en algún punto de este año, el consumo va a empezar a repuntar”, concluyó Diab.

¿Cuánto cobran por mes los freelancers y los empleados dependientes en las empresas ubicadas en la Ciudad?

Fuente: IProfesional – Un informe oficial determina cuántas personas tienen más de una ocupación y cuánto dinero ingresan por sus trabajos secundarios.

Mientras muchas personas sueñan con dejar el trabajo en relación de dependencia para generar más ingresos de manera freelance o como cuentapropista, los datos oficiales al menos en la Ciudad de Buenos Aires no estarían promoviendo ese escenario. 

De acuerdo a la Encuesta Trimestral de Ocupación e Ingresos (ETOI) del gobierno porteño (GCBA) la población de este distrito que se desempeña por cuenta propia -que son un cuarto de la población ocupada en la Capital Federal-, tuvo un incremento de ingresos del 187,1% hasta el tercer trimestre de 2024, con un valor promedio de 579.789 pesos por esa actividad y una mediana de 450.000 pesos por mes.

En promedio, la suba fue considerablemente menor a la de la población asalariada (242% en los mismos 12 meses) y desde niveles significativamente más bajos. El grupo con un salario mensual representa el 72,3% del total de la población ocupada de la Ciudad, y tenía de acuerdo a los datos del tercer trimestre de 2024 un ingreso promedio de 896.550 pesos mensuales y una mediana de 700.000 pesos.

De esa población asalariada, solo al 71,7% le realizan descuentos jubilatorios, lo que quiere decir que tienen trabajo registrado. Ellos cobran un salario mensual promedio de 1.008.411 pesos, muy por encima de la media de los trabajadores informales, que fue de 613.506 pesos. 

Sin embargo, en los últimos 12 meses analizados en el ETOI, el grupo de los que no tienen descuentos jubilatorios incrementó su ingreso en promedio un 252%, en tanto que los asalariados registrados vieron subas de solo 239,5% en el mismo lapso. Es decir, como los sueldos de los informales se encontraban mucho más atrasados respecto de la inflación y eran por menores valores, en 2024 vieron un aumento mayor en porcentaje al que tuvieron los empleados en relación de dependencia.  

En el caso del servicio doméstico, los ingresos de las personas ocupadas en estas labores (279.969 pesos por mes de media) tuvieron una suba promedio de 246%, de acuerdo al informe oficial.

Ingreso promedio en la Ciudad de Buenos Aires (Instituto de Estadísticas y Censos de CABA)

Ingreso promedio en la Ciudad de Buenos Aires (Instituto de Estadísticas y Censos de CABA)

Más de un trabajo

El fenómeno de los trabajadores pobres que en los últimos años se extendió en la Argentina -personas con empleo registrado que quedaban debajo de la línea de pobreza- hizo que muchas personas tomaran ocupaciones o actividades secundarias para generar ingresos extra. 

Si bien el año pasado en general los ingresos comenzaron a recuperarse y la pobreza cayó, aún hacia el tercer trimestre de 2024 el 11,2% de la población ocupada de la Ciudad tenía más de una ocupación (175.000 personas). Eso implicó que la cantidad de personas con más de una ocuación se redujo 7,2 puntos porcentuales en un año.

 Aún así, entre los trabajadores con más de una ocupación, el promedio de horas trabajadas totales en la semana asciende a 46,4 horas (mediana 45 horas), y dedican a su tarea secundaria unas 13,2 horas semanales. 

¿Cuánto ganan? Ingresan en promedio 392.395 pesos por mes por esa actividad secundaria (la mitad o mediana gana 300.000 pesos o menos). La masa de ingresos que resulta de las ocupaciones secundarias implica el 25,7% del total de ingresos laborales presentes en la Ciudad, y el 4% de la masa de ingresos total de los/las trabajadores/as con una o más ocupaciones.

Un dato destacado del informe del GCBA es que 9,9% de la población con más de una ocupación obtiene mayor ingreso de las tareas laborales secundarias que en la principal.  Ese grupo también se redujo desde 16,5% en 12 meses.

«También vale decir que una de cada ocho personas ocupadas con más de una ocupación, no recibe pago en alguno de sus trabajos», resaltó el reporte oficial.

¿Cuánto gana en promedio un trabajador en la Ciudad de Buenos Aires?

De los hogares de la Ciudad, el 75,5% percibe ingresos por la participación actual en el mercado de trabajo de alguno/a de sus integrantes y el 37,4% recibe ingresos por jubilaciones, pensiones, seguro de desempleo, ocupaciones anteriores y/o indemnizaciones.

Pero mientras los precios en la Capital Federal crecieron hasta el tercer trimestre de 2024 un 240,6% interanual, el ingreso total familiar de esos hogares solo se incrementó un 208,5%, y el ingreso per cápita familiar 208,8%. Es decir, en la Capital Federal al menos en materia de ingresos promedio, el anterior fue un año de pérdida de poder adquisitivo. 

El ingreso individual (neto de aguinaldo cuando correspondiera), compuesto por todos los ingresos laborales y no laborales fue en el tercer trimestre de 806.835 pesos por mes, con un incremento interanual de 208,3%. Los ingresos laborales aumentaron 214,3% en la comparación con el mismo período del año anterior, y los no laborales un 188,8% en igual lapso. Ambos por debajo de la inflación oficial de la Ciudad.  

«El promedio de ingresos de la ocupación principal en el tercer trimestre de 2024 es de $836.489 y la mitad de la población ocupada tiene un ingreso en su ocupación principal de $650.000 o menos. El aumento medio de estos ingresos es de 220,9% en el período, con disparidades al interior de la población ocupada. La suba se da con una reducción de 1% en la población ocupada con ingresos», aclara el reporte de la Ciudad.

Cuánto cobran los trabajadores: rubro por rubro

Luego, si se consideran los ingresos de acuerdo al rubro de la actividad principal, los servicios -excluyendo al servicio doméstico- representaban el 71,7% de la población ocupada con ingresos en el período (tercer trimestre 2024), que obtenían en la actividad principal un ingreso promedio de 895.912 pesos por mes.

Este ingreso se coloca por encima de Industria y Construcción (754.615 pesos con el 12% de la población ocupada) y de Comercio ($742.450, con el 15,5% dela población ocupada).

Pero el mayor aumento interanual de ingresos se produjo entonces en Industria y construcción (249,3%) y en menor medida en Comercio (244,8%). Por su parte, los ingresos en Servicios tienen un desempeño intermedio (212,9%).

Brecha de Genero

La brecha laboral y de ingresos por género se vuelve a confirmar en este reporte trimestral de la Ciudad de Buenos Aires: en el tercer trimestre de 2024, los varones ganaban en promedio 921.089 pesos mensuales y las mujeres 745.088 pesos, un 19,1% menos.

Desde un valor superior, el ingreso de la ocupación principal de los varones creció 217,8% en 12 meses, en tanto que el de las mujeres, lo hizo en 220,9% en el mismo período. Como resultado, la diferencia (%) de ingresos mermó en términos interanuales.

«Los asalariados varones tienen un ingreso en su ocupación principal de $983.488, y la mitad de ellos gana hasta $800.000 al mes. Por su parte, las asalariadas mujeres tienen un ingreso en el mercado de trabajo que en promedio es de $810.796 y la mediana es de $670.000», se lee en el reporte del Instituto de Estadísticas y Censos de CABA. 

No es la única diferencia: la población ocupada trabaja en su ocupación principal en promedio, 37 horas semanales; pero los varones dedican 41 horas a la semana y las mujeres 34 horas. En la comparación interanual, se observa que la duración de la jornada laboral se mantiene sin cambios significativos por sexo.

Para inversores: cuatro franquicias de baja inversión y rápido recupero

Fuente: Ámbito – Una de las claves de este tipo de franquicias es que también son de fácil operación para el franquiciado. Alimentación y retail, entre los rubros con mayor dinamismo.

Invertir en una franquicia puede ser una gran alternativa para quienes buscan iniciar su propio negocio con un modelo probado y respaldo de marca. Sin embargo, muchas veces el capital inicial se convierte en una barrera difícil de superar.

Lo cierto es que el mercado presenta muchas oportunidades con baja inversión y un recupero rápido, ideales para quienes quieren dar sus primeros pasos en el mundo del emprendimiento sin asumir grandes riesgos. Desde alimentos congelados hasta tiendas especializadas en huevos y milanesas listas para cocinar, estos modelos de negocio ofrecen simplicidad operativa y una demanda constante, factores clave para lograr rentabilidad en poco tiempo.

Tienda de huevos es el primer mayorista y minorista de huevos de la Argentina. La firma ofrece en sus locales más de siete categorías de huevos diferentes y además es productor, por lo que está integrada verticalmente. Dentro de su órbita se encuentra el establecimiento La Elisa donde posee 2 galpones de cría y 7 de recría. En tanto, desde 2015 se unió al grupo la firma Ovodec que tiene 5 galpones de postura con tecnología internacional.

Actualmente, la empresa tiene 16 locales entre propios y franquiciados y con este último modelo de negocios logró consolidarse fuerte en Capital Federal donde ha concretado la mayor parte de sus aperturas este año.

La inversión total estimada para instalar un local de Tienda de huevos es de u$s18.000 y el recupero de la inversión está proyectado en un lapso de 12 a 16 meses. Desde la compañía explican que el manejo por parte del franquiciado es muy sencillo y que operan un segmento de negocios de alta rotación y alto consumo per cápita.

Emplatame, almacén de congelados, es una opción dentro del mercado de alimentos congelados a tener en cuenta. Con 30 años de experiencia, ofrece platos gourmet, saludables, listos en minutos. Según explican desde la firma, su propuesta satisface a los amantes de la buena cocina que sin tiempo, ganas o por confianza eligen productos de alta calidad, congelados, al vacío y listos para regenerar o preparar sus propios platos.

La inversión total para instalar una franquicia de Emplatame ronda los u$s21.000 y la facturación promedio del local está proyectada en el orden de los $32,2 millones.

Por su parte, el retorno de la inversión está pautado en un plazo de alrededor de 18 meses. El local debe tener mínimo 40m2 la firma ofrece al franquiciado la posibilidad de entregar locales «llave en mano», es decir que se encarga de todo el acondicionamiento para la puesta en marcha.

La Milanesería, es una franquicia relativamente nueva, comenzó a operar en este formato en 2024, cuenta actualmente con siete locales y busca seguir expandiéndose. La empresa tiene su foco de negocios en la venta de milanesas preparadas, listas para cocinar y una de sus principales características es que ofrece una amplia variedad que van desde milanesas de ternera, pasando por cordero, pollo y cerdo, hasta vegetarianas.

La inversión total para instalar una franquicia de La Milanesería ronda los u$s25.000 y según la empresa, cada establecimiento tiene una facturación promedio anual de aproximadamente u$s150.000. La dimensión mínima del local es de 40 m2 y una cuestión fundamental es que este tipo de negocio es de muy fácil operación para el franquiciado. Finalmente, el recupero de la inversión está proyectado a partir de los 8 meses.

Colorshop es una de las cadenas de pinturería más importantes del país con más de 300 locales en operación. La empresa ofrece en sus establecimientos toda la línea completa de Sinteplast, que abarca arquitectónica, automotor, industria y construcción.

La firma ofrece al franquiciado todo el know how no solo para la instalación del comercio sino también para su funcionamiento. El monto estimado que debe desembolsar un inversor, dependiendo del tamaño del local, ronda los $86,5 millones más impuestos. Por su parte, la facturación promedio anual del local está estimada en $120 millones y el recupero de la inversión está proyectado en entre 12 a 18 meses.

Entre las características principales que destaca Colorshop para la instalación de un local de su marca, es que debe tener una dimensión de alrededor de 120 m2 y preferentemente localizado en una esquina.

La empresa ofrece además el modelo llave en mano por el que el franquiciado no debe ocuparse de las obras previas del establecimiento. Por último, el contrato es de cinco años y lo ideal es que el franquiciado sea activo en la operatoria.

Colorshop también cuenta con una sólida tienda online que justamente se respalda en sus franquiciados. Lo que genera un ingreso adicional para el local del inversor.

La UIA le recordó a Caputo que se perdieron 30.000 empleos y el ministro les prometió que les nivelarán la cancha

Fuente: Clarín – Tal vez porque se acordó en diciembre y se concretó recién hoy, la reunión de la UIA con el ministro Caputo generó demasiadas expectativas. Pero en las dos horas de diálogo al menos los industriales se quedaron con la promesa de que el Gobierno hará todo para «equilibrar la cancha».

En lo que fue un ambiente distendido y en línea con Javier Milei, Caputo insistió que el Gobierno no va a devaluar y que «tampoco el FMI lo pide».

Y a renglón seguido, el ministro alentó a los industriales que ellos mismos salgan a cancha a exigir a provincias y municipios que bajen Ingresos Brutos y tasas municipales. Por lo que compete a la Nación, Caputo les dijo, como antes había anticipado a los ruralistas, que eliminarán el impuesto al cheque. Eso sí, no les dijo cuándo.

En lo que el presidente de la UIA, Daniel Funes de Rioja, definió como un diálogo, se evitó hablar del tipo de cambio, pero se abordaron los temas que erosionan la competitividad de la industria: presión fiscal, costos logísticos, laborales, la competencia desleal del contrabando creciente y hasta de la tarifa de las ART que en Argentina llega al 3,5% de la plantilla laboral mientras en los países vecinos no alcanza al 2,4%. Lo atribuyen a la alta litigiosidad laboral: existen 300.000 juicios en stock.

Caputo, que asistió con sus dos espadas, Pablo Quirno y Pablo Lavigne; les avisó de entrada que no quería almorzar. Y fue recibido con un crudo diagnóstico: el último año la industria perdió 30.000 puestos de trabajo.

Precisamente, Quirno y Lavigne se quedaron unos minutos más y fueron abordados por algunos de los asistentes ante problemas puntuales. Por el lado de la UIA, además de Funes de Rioja y su director ejecutivo Diego Coatz, asistieron Martín Rappallini (Cerámicas Alberdi), Isaías Drajer (Laboratorios), David Uriburu (Techint), Adrián Kaufmann (Arcor), Miguel Rodríguez (Sinteplast), Rodrigo Pérez Graziano (automotrices), Luis Tendlarz (textiles) y Javier Viqueira (Metalúrgicos).

Durante la reunión con varias rondas de café y agua mineral varios consultaban a sus celulares en horas en las que caían las bolsas del mundo, subía el riesgo país y se desplomaba el precio de las acciones argentinas.

Varios quisieron saber cuál iba a ser la política del Gobierno respecto al aumento de los aranceles por parte de Donald Trump que castigan a dos socios importantes de la UIA, Techint y Aluar.

El ministro soltó como respuesta un acuerdo de libre comercio con EE.UU. Y les preguntó qué pensaban del Mercosur. Le dijeron que así como estaba no funciona, se mostraron partidarios del acuerdo con la Unión Europea. Y eludieron referirse a la propuesta de libre comercio con Washington. Lo ven difícil.

Funes de Rioja recordó que Argentina es un país industrial, a diferencia de otros y que ese sector aporta 40% del impuesto a las ganancias, además de emplear a 1,2 millones de personas. Hace unos años eran 1,5 millones.

“La agenda se basó en la importancia de reducir el costo argentino para equilibrar las condiciones internas frente a la importación, evitando la competencia desleal. Durante el encuentro, las autoridades destacaron los resultados alcanzados en materia de equilibrio fiscal y comercial, la normalización de la deuda comercial, la reducción de la inflación y la brecha cambiaria, entre otros, señaló la UIA en un comunicado.

“La industria no quiere protección ni condiciones especiales sino igualdad de oportunidades para competir frente a un mundo convulsionado en materia comercial”, dijo Funes de Rioja.

En el comunicad, se asegura que Caputo afirmó: “Este Gobierno está a favor de la industria y del sector privado. Nuestro equipo está siempre abierto al diálogo y a recibir propuestas. Vinimos a bajar impuestos, en consecuencia necesitamos también el esfuerzo de las provincias y los municipios para reducir tasas e ingresos brutos”.

Aquí los otros puntos que estuvieron sobre la mesa:

  • La UIA indicó que tras la corrección de los desequilibrios fiscales y externos, el desafío es la recuperación de la actividad industrial que tuvo una caída de 9,4% del producto industrial durante 2024 y la pérdida de 30 mil puestos de trabajo.
  • El 46% del costo de los bienes industriales corresponde a impuestos y que el sector industrial es el que más aporta a la recaudación y el empleo, con 1,2 millones de trabajadores formales, generando dos empleos indirectos por cada puesto directo.
  • Destacaron que los precios de la industria estuvieron 50 puntos porcentuales por debajo de la inflación durante 2024.
  • La UIA planteó una hoja de ruta a favor de mejorar la competitividad argentina en el corto y mediano plazo, que tiene como puntos destacados en materia tributaria la devolución de saldos a favor acumulados en impuestos nacionales con especial énfasis en Impuesto Pais, IVA y reintegros de exportación; permitir el cómputo del Impuesto a los Débitos y Créditos Bancarios como pago a cuenta de Impuesto a las Ganancias e IVA en un 100% para las PyMES y también con un esquema para grandes industrias, de forma potenciar a los sector formales, y la eliminación de derechos de exportación para las manufacturas de origen industrial (MOI), en un contexto de fuerte competencia global y suba de aranceles.
  • A nivel legislativo, la UIA pidió Impulsar el Proyecto de Ley de Promoción de Inversiones y Empleo y mientras se avanza, un esquema de amortización acelerada para la industria (en particular para PyMis), y la reducción del costo laboral no salarial: contribuciones patronales a cuenta de IVA para el sector industrial intensivo en trabajo.
  • Frente a la competencia desleal, las autoridades solicitaron utilizar de manera ágil el nuevo esquema antidumping; fortalecer los controles aduaneros para evitar el contrabando e implementar una mesa de seguimiento para formalizar y minimizar el impacto del comercio ilegal

La clave para el crecimiento y la continuidad de las PyMEs

Fuente: Perfil – Las transiciones empresariales no son una opción, son una certeza que todos los dueños de negocios enfrentaremos en algún momento.

Las transiciones empresariales no son una opción, son una certeza que todos los dueños de negocios enfrentaremos en algún momento. Ya sea por una oportunidad de venta, la búsqueda de nuevos desafíos o circunstancias inesperadas, la clave para garantizar la continuidad de nuestra empresa y maximizar su valor está en la planificación.

Sin embargo, en mi experiencia como consultor en Exit Planning, y en mi última encuesta realizada, he constatado que el 84% de las pequeñas y medianas empresas (PyMEs) en Argentina no cuenta con un plan documentado de transición. Aunque el 91% de los dueños reconoce su importancia, solo el 16% ha tomado medidas concretas. Esta brecha entre conciencia y acción limita nuestras opciones estratégicas como dueños de empresas, pero también puede reducir significativamente el valor de nuestros negocios ante una transición.

La transición como oportunidad. Para muchos de nosotros, nuestra empresa representa el trabajo de toda una vida y concentra entre el 80% y el 90% de nuestra riqueza. Tener un plan de salida no solo es una medida de prevención, sino una herramienta que nos permite decidir cuándo y cómo queremos dar el próximo paso en nuestra trayectoria.

Un plan de transición bien estructurado no se trata solo de prepararnos para imprevistos, es estar listos para aprovechar oportunidades inesperadas, como una oferta de compra atractiva o la posibilidad de diversificar nuestro tiempo en nuevos proyectos. La planificación no es una señal de retiro, es una estrategia para garantizar que la empresa continúe generando valor y crezca con una nueva visión.

PyMEs: el motor de la economía que necesita planificación

Según datos del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) y del Ministerio de Economía, las PyMEs representamos el 99,3% de las empresas en Argentina y somos responsables de la mayoría del empleo privado. A pesar de nuestra importancia, la falta de preparación para el futuro compromete nuestra estabilidad y desarrollo.

Un negocio sin una estrategia de transición definida enfrenta dificultades para atraer inversores, acceder a financiamiento y mantener su competitividad. En cambio, aquellos de nosotros que trabajamos en la profesionalización de nuestra gestión y en la documentación de nuestro plan de salida estamos mejor preparados para el cambio, y podemos aumentar el valor de nuestra empresa en el mercado.

Empresas familiares: desafíos y oportunidades. El informe que lideré señala que el 62% de las PyMEs encuestadas son empresas familiares, donde las transiciones pueden ser más complejas. El 30% de las empresas familiares afirma no contar con un miembro de la familia preparado para asumir roles clave. Además, el 22% no tiene certeza sobre esta cuestión, mientras que el 27% considera que solo algunos integrantes están capacitados. Por otro lado, el 24% de los dueños nunca ha discutido el tema de la sucesión con su entorno, el 11% lo hace en periodos mayores a un año y el 12% aborda la cuestión una vez al año.

Una transición planificada protege la estabilidad del negocio y al mismo tiempo permite que los líderes de la próxima generación reciban la preparación necesaria para asumir responsabilidades. La profesionalización del proceso es clave para evitar conflictos y asegurar la continuidad de la empresa con una visión de largo plazo.

Exit Planning: un camino hacia el crecimiento sostenido. El Exit Planning es una herramienta estratégica que nos ayuda a construir empresas más sólidas y sostenibles. Un plan bien diseñado permite conocer el verdadero valor del negocio, identificar mejoras en la operación, evaluar posibles compradores o sucesores, y establecer estrategias para maximizar su potencial de crecimiento.

La planificación no significa que debamos realizar una transición de inmediato, nos otorga opciones para tomar decisiones informadas, cuando decidamos hacerlo y en ese momento estar preparados. Empresas con planes de transición bien estructurados tienen más probabilidades de sostenerse en el tiempo, generar empleo y seguir aportando al desarrollo económico del país, y tener empresas más atractivas y valiosas, probablemente puedan constituir empresas trascendentes, entre otras cosas que no dependan de sus dueños.

Un futuro con más opciones. Las transiciones empresariales son inevitables, pero pueden ser gestionadas de manera positiva y estratégica. Las empresas y su dueños que pueden incorporar estas prácticas dentro del negocio y del día a día, pueden transmitir un legado, también fortalecer nuestra competitividad, crecimiento y como dueños tener mayor “libertad” y opciones.

No se trata de planificar para vender (por supuesto es una de las alternativas, pero no la única ni la más importante), sino de asegurarnos de que nuestra empresa trascienda más allá de nosotros y continúe generando valor en el tiempo. La clave está en anticiparnos, prepararnos y convertir cada transición en una oportunidad de evolución y crecimiento.

Gustavo Schut consultor especializado en Exit Planning y autor de “La reinvención del dueño”Gustavo Schutt, consultor especializado en Exit Planning y autor de “La reinvención del dueño”

por Gustavo Schut

Enigma inmobiliario: el nicho en el que sube la vacancia pero también los precios

Fuente: Cronista – Los centros logísticos suman más metros disponibles en el último trimestre del año pero curiosamente los precios siguen su tendencia alcista. Las explicaciones de los especialistas. Cuáles son las zonas más demandadas.

La regla de «a mayor oferta, menores precios» no parece funcionar en el mercado de centros logísticos. Hoy este sector tiene mayor disponibilidad de metros cuadrados (m2), sin embargo, los precios se revalorizaron y subieron en el último trimestre de 2024.

Así se desprende de un informe de CBRE, empresa inmobiliaria que brinda servicios corporativos. «En términos de metros, la disponibilidad en el último tramo del año alcanzó los 140.200 m2, cifra que muestra un incremento del 3,4% respecto del trimestre anterior«, resalta el relevamiento.

Curiosamente en la empresa explican que «los precios suben porque se suman nuevos metros libres». Y es que «al tratarse de espacios más nuevos, con mayor calidad edilicia y nueva tecnología, los valores de los alquileres se disparan y genera que se revalorice toda la oferta del mercado», explicó Karina Longo, Research Manager de CBRE.

Además, para la especialista, si bien la cantidad de metros cuadrados disponibles creció  en el último trimestre del año, todavía sigue siendo escasa para la demanda existente. «Esto también impulsa los precios hacia arriba», explicó.

En números; el precio de renta en los centros logísticos en el último trimestre del año fue de u$s 7,7 por m2. Mientras que en el periodo anterior ese valor era inferior de u$s 7,4. Si bien el aumento es muy leve los especialistas hablan de un cambio de tendencia con precios en recuperación. Mientras que, la tasa de vacancia fue del 5,3 por ciento.

Por su parte, según datos de Cushman & Wakefield, otra de las empresas que brindan servicios inmobiliarios corporativos, la vacancia debería estar por lo menos dos dígitos por encima. «El mercado enfrenta la necesidad de nuevos proyectos que alivien la presión sobre la vacancia llevando el número al 7%«, resalta.

Además en Cushman reconocen que hay un cambio de tendencia. «La estabilización económica y una inflación en retroceso transformaron el panorama del mercado: acumular stock dejó de ser una oportunidad y comenzó a representar un riesgo, lo que incentiva cambios en las estrategias de inversión», agrega.

Las zonas más demandadas

Por submercados, el informe de CBRE destaca al corredor de la ruta nacional 9 que concentra el 29,6% de la superficie disponible y no registró absorción durante 2024. 

Le sigue el Triángulo de San Eduardo (TSE) -en zona Norte camino hacia Rosario- con el 26,1% del total disponible. La zona de Fátima-Pilar vuelve a tener superficie disponible luego de dos años, concentrando el 21,4% de la misma, como resultado de la incorporación de 70.000 m2 en un nuevo centro logístico localizado en Parque Industrial Pilar.

Se destaca además una nueva zona en el Sur que es observada por los especialistas como «la nueva alternativa al Triángulo San Eduardo», vemos que su atractivo comienza a traccionar la demanda cada trimestre un poco más» comentó Nicolás Ferrero, Industrial Broker de CBRE.

Por su parte, Ignacio Amadeo Álvarez, coordinador de Market Research en Cushman & Wakefield, sostuvo que se «prevé que continúe el interés por metros cuadrados dentro de la ciudad de Buenos Aires, que son de alta demanda y de gran valor estratégico».

La novedad está en torno a los precios de renta pedidos: todas las zonas muestran una revalorización, excepto el corredor de la ruta 9 que permanece sin cambios respecto del trimestre anterior.

Los valores de zona Sur superaron a los del Triángulo San Eduardo, que históricamente ostentaba los valores más altos del mercado.

En qué consiste la histórica desregulación en la industria de la fruta

Fuente: ON24 – El SENASA trabajará directamente con los productores únicamente ante las pestes que surjan y al momento de realizar la emisión de certificados fitosanitarios.

El ministro de Desregulación del Estado, Federico Sturzenneger, explicó a través de su cuenta en la red social X que “todo arrancó cuando me escribió Walter Javier Detzel, contándome que le pedían envases para sus sandías que su cliente externo no aceptaba. La solución: cargaba el barco y cuando salía desarmaba los paquetes exigidos y los reemplazaba por los que sí servían. (¡Gracias Walter por escribirnos!). Lo cierto es que lo de Walter resultó la punta del témpano, abajo pululaba una maraña de resoluciones y obligaciones típicas de un estado militar-kafkiano”.

“Nos preguntamos: ¿Cuál es el verdadero sentido de la intervención de SENASA en los mercados del empaquetado y fruta?. La respuesta fue muy clara: la vigilancia sanitaria (controlar que no haya pestes que puedan propagarse afectando la actividad), y la emisión de certificados fitosanitarios para la exportación (que permiten el comercio internacional de estos productos). Escribimos entonces una norma desde cero focalizada en solo estas dos cosas”, continuó explicando Sturzenegger en su posteo.

A partir de la nueva regulación, “los productores solo tienen que avisarle al SENASA lo que hacen y dónde están (así, en un evento sanitario, el organismo puede trabajar con los productores para contener el foco), y donde también ponemos al SENASA a disposición para la emisión de certificados fitosanitarios”, apuntó el ministro en la red social de Elon Musk.

Entre muchas otras, Sturzenneger destaco las siguientes desregulaciones implementadas con esta resolución:

  • Se deja de pedir habilitación de instalaciones, mucho menos la necesidad de revalidarlas anualmente. Todos los trámites en curso caen automáticamente, las firmas registradas ya no necesitan hacer nada más.
  • El productor puede cosechar cuando quiera ya que se eliminan los permisos de autorización de cosecha (sí, antes un burócrata te decía si podías cosechar y cuándo).
  • Se elimina toda la normativa que tiene que ver con envases. Los envases pasan a ser una elección libre de los productores. (Sí, antes el Senasa decía como envasar y te verificaba que le dieras bola).
  • Senasa estará disponible para certificar lo que exijan las autoridades sanitarias de los países importadores. Pero no va a poder exigir ningún trámite adicional. (Adiós a medir el tamaño de las cabezas de ajo que luego se usaban para hacer pasta, o pedirte la habilitación de una fábrica para certificar muestras).
  • Se eliminan las restricciones a la exportación por tipología de fruta (antes solo se permitía la exportación de fruta premium). Se exportará lo que demande el mercado.

“De esta manera los productores van a hacer menos papeleo y el organismo podrá poner mas energía en la vigilancia sanitaria, donde agrega valor. VLLC!”, festejó el funcionario nacional.

¿Quién es el hombre de las sandías?

Walter Javier Detzel nació y creció en Juan José Castelli, un pequeño pueblo chaqueño en el corazón de El Impenetrable. Desde niño ayudó a su padre en la producción de sandías y, con el tiempo, convirtió esa pasión en un fructífero negocio. Fue ese frenesí por la horticultura lo que lo llevó a escribirle al ministro de Desregulación y Transformación del Estado, Federico Sturzenegger, para pedirle que hiciera algo por los empaques para las frutas de gran tamaño como las sandías, que entorpecían la comercialización y exportación a los países vecinos. Ahora, tras la publicación de la resolución 21/25 en el Boletín Oficial, el gobierno simplificó el marco normativo general para el acondicionamiento y empaque de frutas, hortalizas, aromáticas, hongos, algas y semillas comestibles.

Las ventas minoristas pyme subieron 25,5 anual en enero

Fuente: Came – Las ventas minoristas pymes subieron 25,5% anual en enero -a precios constantes-, al tiempo que cayeron 0,5% en la comparación mensual desestacionalizada. Este aumento registrado en el primer mes del año demuestra una recuperación del comercio minorista, iniciada en diciembre de 2024. Cabe destacar que, a pesar del sustancial incremento registrado, los comercios no pudieron recuperar la caída del mismo mes del año pasado, que había alcanzado el mínimo histórico de -28,5%.

Con esta referencia, y teniendo en cuenta que los primeros meses de 2024 tuvieron caídas significativas, se puede esperar que las próximas variaciones interanuales continúen por la senda de la recuperación.

En enero, el comercio pyme enfrentó un escenario desafiante, marcado por la estacionalidad, el éxodo de consumidores a países limítrofes y baja liquidez tras las fiestas de diciembre. Si bien muchos empresarios consultados destacaron como positivo la estabilidad de los precios y una leve mejora real con respecto al año pasado, la mayoría coincide que las ventas siguen siendo menores a lo esperado.

La incertidumbre económica continúa afectando a los comerciantes, reflejándose en el creciente aumento de los costos operativos de las empresas. No obstante, los empresarios mantienen expectativas positivas de cara al resto del año, esperando que el regreso a clases impulse el consumo en febrero y marzo.

Así surge del Índice de Ventas Minoristas (IVM) Pymes de la Confederación Argentina de la en Mediana Empresa (CAME), elaborado en base a un relevamiento mensual entre 1.212 comercios minoristas del país, realizado entre el 1 y 6 de febrero.

Análisis sectorial

En enero, los siete rubros relevados registraron subas interanuales en sus ventas. El mayor incremento se detectó en Bazar, decoración, textiles de hogar (+33,8%), seguido por Alimentos y bebidas (+32,5%) y Textil e Indumentaria (+27,6%).

En la comparación intermensual desestacionalizada, dos rubros presentaron variaciones positivas, Bazar, decoración, textiles de hogar y muebles (+3,9%) y Textil e Indumentaria (+3,1%).

Alimentos y bebidas:

Las ventas subieron 32,5% en la comparación interanual – a precios constantes – mientras que en la comparación intermensual desestacionalizada se observó una caída del 1%. Esta fuerte recuperación del rubro está impulsada, principalmente, por la base de comparación, ya que en enero de 2024 había tenido una retracción del 37,1%.

Durante enero de este año, este rubro se vio afectado por la estacionalidad y la baja en el consumo debido a las vacaciones, con menor nivel de circulación de dinero y clientes fuera de sus ciudades. En algunas regiones como Santa Fe y Buenos Aires destacaron el aumento de costos de insumos, particularmente la carne. Algunos comercios implementaron diversas estrategias como descuentos y diversificación de productos para mitigar el impacto.

Textil e indumentaria:

Las ventas crecieron 27,6% interanual en enero –a precios constantes– y 3,1% en la comparación intermensual desestacionalizada. Este crecimiento interanual sumado a un cierre de año positivo (fue el único rubro que creció en 2024) muestra una recuperación y crecimiento real de los comercios del sector.

En las provincias con fuerte presencia turística, el sector se benefició del flujo de visitantes, especialmente con productos de temporada como indumentaria para actividades al aire libre y trajes de baño. Las promociones y financiación en cuotas sin interés fueron factores clave para el crecimiento de las ventas del sector. Las expectativas a futuro son optimistas: la estabilidad de precios y un progresivo aumento en el consumo generan entusiasmo de cara a los próximos meses.

Bazar, decoración, textiles para el hogar y muebles:

Las ventas subieron 33,8% interanual –a precios constantes– mientras que en la comparación intermensual desestacionalizada tambien se presentó un aumento (+3,9%). El crecimiento interanual esta marcado, entre otros factores, por la baja base de comparación ya que este rubro en enero de 2024 tuvo una caída de 20,5%. No obstante, la variación intermensual positiva denota una recuperación real pese a la estacionalidad típica de enero.

Si bien la actividad se vio afectada por el período vacacional y la menor circulación de personas, estrategias como promociones bancarias, cuotas y descuentos en efectivo ayudaron a sostener el consumo. Algunos comercios destacaron una mayor demanda producto de la radicación de estudiantes universitarios. La estabilidad de precios favoreció la toma de decisiones de compra, aunque persisten los desafíos relacionados a los costos operativos y la carga impositiva.

Calzado y marroquinería:

Las ventas crecieron 19,8% interanual en enero – a precios constantes – mientras que en la comparación intermensual desestacionalizada el rubro tuvo una retracción de 1,9%. La base de comparación de este rubro en 2024 es una caída de -20,8%. Es decir, parte de este crecimiento es recuperación de lo perdido.

La demanda en el sector se sostuvo, en gran parte, gracias a estrategias comerciales como promociones bancarias, descuentos en efectivo y liquidaciones post-fiestas, que incentivaron las compras. Las ventas de mochilas, bolsos y valijas se mantuvieron activas debido al turismo y los preparativos para el inicio del ciclo escolar. El calzado deportivo y urbano también registró un aumento de la demanda.

Si bien algunos comerciantes señalaron que los costos operativos, el aumento en algunos impuestos locales y la falta de circulación de efectivo afectaron la rentabilidad, la mayoría mantiene una expectativa positiva. Se espera que con el retorno de los clientes habituales tras las vacaciones y la estabilidad de ciertos precios la demanda repunte progresivamente en las próximas semanas, especialmente en rubros relacionados con la indumentaria escolar y laboral.

Farmacia:

Las ventas subieron 19,4% anual en enero – a precios constantes –, pero cayeron 3,2% en la comparación intermensual. Si bien el resultado del mes fue bueno, no alcanzó para compensar la caída de 45,8% anual que tuvieron las ventas del sector en enero del año pasado.

El rubro farmacia mostró un comportamiento dispar, influenciado por factores estacionales y estructurales. En algunas localidades, el consumo se sostuvo gracias a la venta de protectores, repelentes y medicamentos para afecciones dermatológicas, mientras que en otras se vieron afectadas por la menor circulación de personas debido a las vacaciones. Un punto destacado fue el impacto de las modificaciones en la cobertura de PAMI, con múltiples farmacias reportando errores en recetas digitales y menor cobertura en ciertos medicamentos. Esto impactó negativamente en la demanda de productos.

Perfumería:

Las ventas subieron 11,9% anual en enero – a precios constantes – mientras que en la comparación intermensual hubo una caída de 0,3%. Si bien esta recuperación interanual es relevante, no se llega a recuperar la caída de 32,6% de enero 2024.

El rubro mostró signos de adaptación al contexto económico, con comercios que lograron mantener las ventas gracias a diversos descuentos, sobre todo en zonas turísticas, implementando promociones y lanzamiento de productos de temporada. Los empresarios consultados indicaron desafíos en la disponibilidad de financiamiento y una mayor cautela en el gasto. Muchos sostienen expectativas positivas para los próximos meses. La cercanía del inicio de clases y la renovación de stock para la nueva temporada generan optimismo en el sector, sumado a la percepción de una mayor estabilidad en los precios y la reactivación progresiva del consumo.

Ferretería, materiales eléctricos y materiales de la construcción:

Las ventas subieron 14,9% anual en enero –a precios constantes– y bajaron 3,5% en la comparación intermensual. Al igual que con los demás rubros, se observa un incremento de las ventas en términos interanuales, pero sin llegar a recuperarse completamente de la caída de enero 2024 (-31,3%).

El panorama fue variado según la región. En algunas zonas del país se destacó una reactivación en las obras públicas y privadas, con mejoras en la disponibilidad de insumos y una marcada estabilidad de precios; en otras, la actividad se vio afectada por la cautela en el gasto y la postergación de proyectos domésticos. Las promociones, financiación en cuotas y descuentos en efectivo fueron estrategias clave para sostener las ventas en un contexto de menor liquidez. De cara a los próximos meses, los comerciantes esperan un repunte de la actividad, impulsado por la reactivación de obras y una mayor estabilidad económica. Varios comercios mantienen una visión optimista y evalúan inversiones en stock ante una posible mayor demanda en el corto plazo.

Desafíos y oportunidades para el sector

Uno de los principales desafíos actuales es la dificultad para afrontar el pago de salarios. Los comercios de Alimentos y bebidas encabezan la lista de sectores más afectados, con un 21,2% de los comerciantes reportando problemas en este aspecto. El sector Textil e indumentaria tampoco es ajeno a esta situación, con un 19,2% enfrentando dificultades similares.

Sin embargo, algunos negocios han logrado manejar mejor la situación mediante estrategias como promociones agresivas y reducción de costos operativos. Por ejemplo, un comercio de calzado en Buenos Aires optó por reducir sus horarios de atención durante la temporada baja, mientras que una tienda de indumentaria en Santa Fe implementó descuentos por pago en efectivo para incentivar el consumo inmediato.

Los comerciantes tienen claro qué cambios podrían ayudarlos en el corto plazo. La reducción de impuestos encabeza las demandas, con un 71,7% de los encuestados destacando su importancia. Un comerciante del sector textil de Mendoza comentó que, con una carga impositiva más baja, podría invertir en nuevas colecciones y generar empleo.

Otras medidas solicitadas incluyen el estímulo a la demanda interna (10,4%), la simplificación burocrática (6,7%) y los incentivos para la contratación de personal (6,3%). Un ejemplo práctico de este último punto es el caso de una pyme de indumentaria en Córdoba que, con una reducción de cargas laborales, podría contratar más empleados para mejorar la atención al público y potenciar sus ventas.

Frente a estos desafíos, los comercios han implementado diversas estrategias para mantenerse competitivos. La diversificación de productos ha sido la medida más adoptada, con un 35,1% de los encuestados innovando en su oferta. Por ejemplo, una tienda de marroquinería en Tucumán sumó accesorios personalizados y logró aumentar sus ventas en un 20%.

También se ha recurrido a la reducción de gastos operativos (21,1%), optimización de horarios laborales y, en menor medida, aumento de horas de atención para captar más clientes. Un local de calzado en Buenos Aires implementó horarios extendidos los fines de semana, lo que le permitió captar turistas y mejorar su facturación.

El principal problema que afecta a los comercios es la falta de ventas, mencionada por un 49,1% de los encuestados. Otro obstáculo significativo es el alto costo de producción y logística (32,1%).

A pesar de ello, los comerciantes mantienen expectativas positivas. Muchos han encontrado en las promociones, el comercio online y la personalización de productos una vía para diferenciarse y captar más clientes.

Percepción de la situación actual y futura

Los comercios pyme han reflejado diversas percepciones sobre su situación económica actual y sus expectativas a futuro. En términos generales, el 24% de los comercios considera que su situación económica ha mejorado en comparación con el año anterior, mientras que un 56% la percibe sin cambios y un 20% señala que ha empeorado. Entre los rubros, el sector de Ferretería, materiales eléctricos y de la construcción muestra el mayor porcentaje de mejora (26%).

En cuanto a las expectativas para el año, el 58% de los comercios espera que la situación de su empresa mejore, 37% cree que se mantendrá igual y solo un 5% anticipa un empeoramiento. El rubro más optimista es Calzado y marroquinería (65%) que espera mejoras.

Respecto a la economía del país en general, el 53% de los comercios cree que mejorará en el próximo año, mientras que un 40% opina que se mantendrá sin cambios y un 7% anticipa un deterioro. El sector de Calzado y marroquinería nuevamente es el más optimista, con un 60% que prevé mejoras.

Finalmente, cuando se les consulta si consideran que es un buen momento para invertir en la ampliación de su empresa, el 19% responde afirmativamente, mientras que un 25% no está seguro y un 56% lo descarta.

El sector con mayor disposición a invertir es Ferretería, materiales eléctricos y de la construcción, con un 23%, mientras que Perfumería es el que muestra menor interés en hacerlo (14%).

Construcción e industria cerraron 2024 a la baja: cómo le fue a cada una

Fuente: Cronista – La industria cerró 2024 con su peor caída desde la reconstrucción de la serie (2016) y la construcción alcanzó un derrumbre del 27% en el año.

La industria y la construcción fueron los dos sectores más complicados en 2024. Indec informó que cerraron el primer año de gestión libertaria con caída

Mientras que la industria cayó un 9,4% en 2024, la construcción cerró con un desplome del 27,4%. 

Industria

La actividad industrial tuvo su primera suba interanual en diciembre (8,4%) desde mayo de 2023. En comparación con noviembre, la suba fue del 0,2% y acumuló seis meses seguidos de variación mensual desestacionalizada al alza. 

La variación acumulada fue atenuando su caída en los últimos meses, dejando atrás los peores registros alcanzados en junio (-16%) para cerrar en -9,4%. 

La baja base de comparación de diciembre de 2023, cuando la industria operó en niveles mínimos de actividad para el mes desde que registra la serie de Indec, asistió a la recuperación interanual del último mes del año. 

Todas las ramas cerraron el año con caída acumuladas, pero 7 de las 9 tuvieron subas interanuales en diciembre. 

La mayor caída en el año la registró minerales no metálicos (-20,4%), seguido por muebles (-18,6% acumulado interanual) y otros equipos y aparatos (-18%). 

En diciembre de 2024, doce de las dieciséis divisiones de la industria manufacturera presentaron subas interanuales. 

Se registraron subas en Alimentos y bebidas (8,3%), Maquinaria y equipo (31,3%), Otros equipos, aparatos e instrumentos (68,1%), Sustancias y productos químicos (7,7%), Prendas de vestir, cuero y calzado (20,6%), Muebles y colchones, y otras industrias manufactureras (33,4%), Vehículos automotores, carrocerías, remolques y autopartes (10,1%), Refinación del petróleo, coque y combustible nuclear (5,9%), Industrias metálicas básicas (2,8%), Otro equipo de transporte (8,5%), Productos de metal (1,0%)  y Productos textiles ( 1,4%). 

Mostraron caídas las divisiones de Productos minerales no metálicos (-13,9%), Productos de caucho y plástico (-8,3%), Productos de tabaco (-9,4%) y Madera, papel, edición e impresión (-0,3%).  

 Construcción

La construcción fue el sector más golpeado en el año y en el cual se perdieron más puestos de trabajo. 

La actividad cerró el año con una caída acumulada del 27,4% mientras que en diciembre la caída fue del 10,2% (la menor baja interanual del año). En comparación con noviembre, la actividad creció 3,1%. 

3 de 13 insumos del sector tuvieron crecimientos. En diciembre, en comparación con el mismo mes de 2023, las caídas fueron: -39,1% en hierro redondo y aceros para la construcción; -32,0% en artículos sanitarios de cerámica; -21,0% en ladrillos huecos; -20,2% en placas de yeso; -18,9% en pisos y revestimientos cerámicos; -18,5% en yeso; -11,5% en cales; -11,1% en mosaicos graníticos y calcáreos; y -5,6% en cemento portland. 

Las subas se registraron en asfalto (58,8%), pinturas para construcción (22,6%) y resto de insumos (2,7%). 

En la variación acumulada, todos los sectores tuvieron caídas, en su mayoría entre el 20% y el 40%. 

La lista de las caídas es:  -41,7% en artículos sanitarios de cerámica; -41,5% en hierro redondo y aceros para la construcción; -40,5% en asfalto; -40,1% en mosaicos graníticos y calcáreos; -33,4% en hormigón elaborado; -29,9% en pisos y revestimientos cerámicos; -28,9% en yeso; -28,1% en ladrillos huecos; -24,3% en placas de yeso; -24,0% en cemento portland; -21,6% en el resto de los insumos (incluye grifería, tubos de acero sin costura y vidrio para construcción); -18,6% en cales; y -5,2% en pinturas para construcción.

En el caso de los puestos de trabajo en el sector, en noviembre la caída fue del 13% interanual, equivalente a un acumulado de -17,2% menos de trabajadores contra enero-noviembre de 2023. Así, el sector contó con 387.405 trabajadores registrados.