Fuente: Ámbito – El billete paralelo saltó por arriba de las $700 después de las PASO y distintos sectores vaticinan qué efecto tendrá la devaluación del mayorista en inflación.
Con la decisión que tomó el Banco Central (BCRA) de devaluar 22% la moneda nacional, el dólar blue trepó hasta los $715 este martes. Todo ello, en los primeros dos días hábiles después de las elecciones Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias (PASO), donde Javier Milei se posicionó como el candidato más votado.
Con sorpresa, distintos sectores tomaron la devaluación del tipo cambio oficial, ya que advierten que rápidamente las listas de precios fueron retiradas y las nuevas entregas de productos no tienen fecha definida.
El problema se acrecienta más para algunos rubros, puesto que fuentes oficiales confirmaron a Ámbito que el recargo del 7,5% que se había aplicado a las importaciones semanas atrás se mantendrá por el momento, por lo que, quienes dependen de insumos extranjeros, sentirán la presión de la devaluación no en un 22%, sino, en casi un 30%.
Cabe recordar que, en agosto, el dólar blue que, a pesar de ser un mercado acotado, sirve de referencia de precios, acumula una suba del 24% o $164, desde los $551 con los que terminó julio. En el año, la divisa paralela aumentó cerca de un 98%, muy por arriba de una inflación que probablemente estará cerca al 62%.
Suba de precios, incertidumbre y complicaciones con las importaciones
Daniel Rosato, presidente de Industriales Pymes Argentinos (IPA), sostiene en diálogo con Ámbito que, la devaluación causo la parálisis de la «actividad industrial» en el día de ayer debido a que la situación generó «gran incertidumbre«.
Comenta que, en muchos casos, este escenario resultó en aumentos de precios, que llegaron al «20%», «y en algunas situaciones, incrementos especulativos«. Sin embargo, Rosato se mostró optimista en que, conforme pasen los días, se comience a dar «una gradual normalización de la actividad a medida que el gobierno tome medidas para encaminar la situación y emita señales de una trayectoria más constante, evitando altibajos«.
Rosato, en particular, destacó la importancia de «atender a las necesidades de la industria en cuanto a las importaciones de insumos y materias primas esenciales para la producción»,
Retención de listas y remarcación de precios «por las dudas»
Natalio Mario Grinman, presidente de la Cámara Argentina de Comercio y Servicios (CAC), comenta a este medio que la devaluación generó que toda la situación en torno al comercio, ya tensa, se tornara «tremendamente complicada«.
«La incertidumbre genera que muchos comercios estén casi paralizados. Hay proveedores que avisan que no tienen lista de precios, otros, que no están vendiendo y los que venden están remarcando por las dudas. Así que, es un escenario muy complejo», indica Grinman.
El representante del Comercio adelantó que esta volatilidad en ese sector va a durar unos «60 días hasta que el panorama se aclare en octubre» y enfatiza que el escenario «es muy complejo«.
Inflación y el traslado del dólar blue a los precios
En primer lugar, el incremento en los precios se origina a raíz de la devaluación del tipo de cambio oficial, que alcanzó un 22%, además de los impuestos aplicados a aquellos que optan por cambiar sus dólares a ese valor, sostiene Damián di Pace, director de Focus Market, en declaraciones a Ámbito.
Y agrega que, en segundo lugar, la falta de disponibilidad de dólares ha llevado a que el mercado paralelo se convierta en «una referencia para los precios, situados entre el tipo de cambio oficial, más los impuestos y el valor del paralelo, de acuerdo al contado con liquidación (CCL)«.
Di Pace advierte que esta situación «efectivamente» va a llevar a una aceleración de los precios de la economía, bajo su mirada «muy fuerte» y, sobre todo, se va a ver en los «productos de consumo masivo«. De hecho, aseguró que ya se está viendo el efecto negativo en lo que es «higiene y limpieza y cuidado personal«.
El mercado todavía está recalculando el impacto de la devaluación en los precios, pero, desde ya, advierten que el Índice de Precios al Consumidor (IPC) podría llegar a los dos dígitos en los meses que están por venir.
La visión de las pymes industriales
José Luis Ammaturo, Presidente de la Cámara Argentina de la Pequeña y Mediana Industria Metalúrgica, expreso que “estos sobresaltos no son buenos para la actividad industrial ni comercial porque estamos en un cono de incertidumbre”.
En este sentido, agregó que “este salto complica considerablemente a las Pymes ya que muchas empresas tienen deudas en dólares y hoy tienen que pagar un 25% más, lo que se suma durante los próximos 69 días a una enorme incertidumbre”. Y explica que “la incertidumbre afecta directamente a la economía, la economía es confianza y, las medidas que se tomaron en los últimos dos años, lo único que hicieron fue crearle más incertidumbre al mercado; nuestras Pymes se descapitalizaron con este incremento abrupto del dólar, con el impuesto agregado muy pocos días atrás y ahora, con este panorama incierto”.
Jorge Sanvitale, director de Mehcco S.A, una pyme referente de la industria eléctrica nacional, también describió la situación como “compleja” y, en relación con el aumento del dólar, explicó que “tenemos materiales pedidos hace meses, incluso algunos desde el año pasado que no llegan y, cuando lo hagan, tendremos que pagarlos al valor actual». “Lo más preocupante para nosotros es que tenemos que respetar viejos contratos con nuevas reglas de juego y eso atenta contra la empresa ya que los índices de actualización no tienen el impacto inmediato de una devaluación como la de hoy y eso nos perjudica enormemente”.
El escenario está caracterizado por la incertidumbre para el sector productivo y los empresarios coinciden en las dificultades que generan los cobros diferidos. «Pedir una mercadería, desconocer su valor al momento de pagarla y recibir el pago a los 60 días afecta nuestro trabajo, lo desvaloriza y crea incertidumbre», manifiestó Sanvitale.
Pablo Ruda, presidente de la Cámara Argentina de la Industria Ferial, indicó que “es muy difícil comprometerse con la realización de los proyectos debido a la inestabilidad ya que es complejo garantizar al cliente el precio y material por la falta de entrega y realización en tiempo y forma”.
«Estos saltos en la divisa detienen la cadena productiva: por un lado los proveedores primarios dejan de vender y entregar mercaderías y frenan la rueda, por otro, a los proveedores que trabajan 100% con productos importados o que compran a importadores, si este simbronazo los agarra en medio de una operación, tienen que disponer del capital para poder finalizar lo que empezaron y es muy complejo resolver”, explicó Ruda.
Ammaturo insistió en que la situación “es bastante compleja” pero que no se debe al valor del dólar blue, que es “una referencia”, sino porque “las empresas no consiguen dólares para pagar a sus proveedores y ese es el mayor problema ya que puede producir desabastecimiento”. “Esta situación va a generar, aumento de costos y faltante de mercaderías”, remarcó.